Cuando no puedes ver el "color" en tu vida...
Estamos en primavera, Barcelona se viste de colores y de encanto. Hay música por muchos rincones...y sin embargo yo, no los puedo ver....
La fibromialgia habla por mí, y no me gusta el reflejo que veo de mi misma. Casi llorando, dolorida y entumecida toda, me puse de pié, me vestí y cuando estuve lista.... invité a mi marido a pasear.
No estaba muy convencida de lo que hacía, pero tenía conocimientos de la técnica, no lo pensé más, callé mi mente y me puse a andar... Camino, descanso, camino, descanso y así llegue a un pequeño parque. Cubierto de flores, con mantos verdes, lilas, rosas y todas las tonalidades intermedias que podáis imaginar. Y me senté a mirar, a agradecer ese precioso regalo que me llegó gratuitamente. Siempre siempre la vida me dá mas de lo que yo ofrezco. Es increíble!!! Lo puedes ver? Yo puse ganas para no solo vivir con lo que me toca, sino para vivirla lo mejor posible, honrando este privilegio, y ella se encargó de llenarme de flores, de colores, ....de vida!!!! Poco podía hacer por fuerza, pero mi corazón daba brincos de alegría!!!! Entonces recuperé la esperanza, claro que sí puedo. Claro que pasará este brote.
Regresé a casa, con menos dolores, con una sonrisa en la cara y con el corazón desbordando alegría. Agradecida, infinitamente, a esta nueva manera de despertar a la vida que he encontrado. Aquí estoy, otra vez, lista para enfrentar lo que queda del brote. Aquí estoy, mirando otra vez mi vida "en colores".



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