“Lo que no te mata….te hace mas fuerte”

“Lo que no te mata….te hace mas fuerte”

Cuando pude mirar mi enfermedad como un compañero de viaje que estaría conmigo siempre, decidí que este compañero fuera lo mas silencioso posible. Y que esta vida, la mía, iba de mí, no de la fibromialgia. Por lo tanto era yo el centro de mi recuperación. Aprendí la importancia de reconocer los pequeños logros que tenía a diario. También comencé a aceptarme tal cual soy, con mis potenciales, con mis voluntades y también con mis limitaciones. Esa ha sido, amigo/a mío/a la clave para comenzar a recorrer mi nuevo camino.

           

En tres pasos podemos comenzar a trabajar

1 Hay que parar antes de que duela

2 mas vale persistencia que insistencia

3 mañana será otro día

1 Hay que parar antes de que duela

Descubrir que nuestro cuerpo tiene una alarma propia y que nos lo hará saber. Cuando “suena” la alarma es muy provechoso. Nuestro cuerpo habla y nosotros estamos aprendiendo su idioma.

2 Mas vale persistencia que insistencia

Aprende que cinco minutos diarios son mucho más que una hora cada quince días, porque los excesos te llevarán a un nuevo brote.  La importancia de los pequeños pasos garantiza que vas por buen camino.

3 Mañana será otro día

No te desanimes, siempre podemos volver a comenzar. Recuerdo que solía utilizar mucho una expresión: "en cuanto me suelte, vuelvo de nuevo a la carga”, así pasaba el brote con mayor tranquilidad y sentía la importancia de estar yo ala mando, de tener el control. Reconocía que tendría que pasar esos días de dolor, fatiga, o lo que fuera, pero en cuento pudiera, volvería a comenzar mi mejora.

A partir de ahora, puedo enfocar mis objetivos, hasta donde veo mis límites actuales. Que no serán siempre los mismos, sino que cada día deberé adaptarlos o ajustarlos, o simplemente ir a por ellos.

            “Lo que no te mata…..te hace mas fuerte”